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Columna Agronomídia – Por Ricardo Campo¹

Viene de la sabiduría matuta el dicho que dice que, cuando se pone un huevo, hay que cacarear. Y eso vale muy bien para el medio rural, donde es necesario ir al campo para producir, pero sin dejar de lado la oportunidad de comunicarse.

Dentro de la portera, la comunicación interna surge como aliada para que los procesos sean seguidos y mejores resultados operativos sean alcanzados. Fuera de la portera y más allá, la comunicación de marketing puede ser una herramienta para agregar valor y ayudar en el diálogo con el mercado y las partes interesadas.

Todos los días comemos, nos vestimos y utilizamos productos del sector agropecuario. Pero, desafortunadamente, todavía falta de comunicación entre el campo y la ciudad, algo que resulta en desinformación, creación de mitos y estigmas. Como este es un dilema que debe estar en la mirada de todos los agentes del agro, aquí en Agronomídia no sería diferente.

Creando puentes, uniendo lo rural a lo urbano

Como parte del programa Agrolíderes de Rabobank realizado en Colombia, conocí el trabajo de CropLife Latin America, una organización internacional sin fines de lucro que representa el sector de insumos y ciencias de los cultivos, conectando empresas y asociaciones del sector en 18 países.

Y es justamente una iniciativa desarrollada por esta entidad para aproximar el campo a la ciudad que quisiera compartir por aquí, el caso de activismo digital “El Agricultor Primero“.

En un mix que envuelve sitio Web, Facebook, Instagram, Twitter y YouTube, el movimiento busca dar visibilidad, realzar y posicionar al agricultor como proveedor de alimentos al público urbano.

El objetivo es informar y familiarizar a quienes viven en la ciudad sobre la agricultura para que haya un compromiso de difundir información, apoyar políticas públicas que beneficien a los agricultores y adoptar nuevos comportamientos, como evitar el desperdicio de alimentos.

Información y diseño atractivo en algunos de las publicaciones de la campaña en Instagram

¿Productor, campesino o empresario rural?

La planificación de la campaña es un detalle relevante, pues partió de los resultados de una encuesta que abarcó público de Argentina, Bolivia, Perú, Chile, Colombia, Guatemala y México. Se entrevistaron a 1.255 personas, siendo 890 individuos de las ciudades y 365 agricultores.

De las notas principales, como el desconocimiento del origen de los alimentos y de la tecnología aplicada a la agricultura, llama la atención el hecho de que el 82% de los encuestados considerasen que los agricultores no se comunican lo suficiente con la opinión pública y el 81% afirman que no es usual encontrar productores rurales en los medios de comunicación.

Cuando se les preguntó sobre cuál de las actividades profesionales era imprescindible para el futuro de nuestra especie, espontáneamente, agricultor y científico surgieron con el 40% y el 44% de las respuestas.

Considerando que la agricultura y la tecnología a menudo caminan juntas, excluyendo aquí a aquellos que renuncian a los recursos tecnológicos para una producción orientada por la ideología, parece que hay una gran oportunidad de comunicación en las manos del agro. Tal vez le falte al sector sólo una estrategia para salir de los bastidores de la producción y asumir el papel de protagonista en el show business de la vida real.

Otros aprendizajes importantes también fueron acumulados a partir de los comentarios y reacciones a las publicaciones de contenidos en los canales del proyecto. Se percibió un diferencial semántico en la forma como el público de las ciudades interpreta algunos de los rótulos que pueden identificar al hombre del campo, como:

– Agricultor: genera empatía y disposición a apoyar sus causas.

– Empresario del agro / agro negocio: no genera empatía, ni disposición al apoyo.

– Campesino: la reacción es emotiva, pero genera mucha confusión por evocar solidaridad por la asociación a la “persona carente” y a una idea romántica de agricultura.

Ni la Copa del Mundo quedó fuera, teniendo destaques agrícolas el perfil de Facebook

Quién no se ve no es recordado…

Además de las acciones en el medio digital, se realizan acciones off-line en ciudades, en ferias agrícolas y ya se han promovido foros internacionales, en Colombia y México, para el diálogo con la sociedad, la generación de oportunidades de mercado, la orientación sobre las buenas prácticas agrícolas y la seguridad alimentaria, la food safety.

Para sostener estas acciones, hay una inversión estimada de US$ 350 mil para los tres años de duración del proyecto que ya cuenta con el apoyo de más de 25 mil personas que se han sumado, 13 mil visitas mensuales al sitio Web y un perfil de Facebook con más de 130 mil seguidores.

Según Mónica Velásquez, directora de comunicaciones de CropLife Latin America, “en los próximos meses nos enfocaremos en fortalecer la confianza que la ciudad debe tener en los productores y en las buenas prácticas que se realizan en los cultivos. Realizaremos una invitación para que se consuman en las ciudades más frutas y vegetales, que reconozcan el papel de las mujeres agricultoras y promoveremos la reflexión sobre la relevancia de la agricultura para América Latina”.

En tiempos de comunicación digital y empoderamiento creciente de las audiencias, este es un ejemplo de cómo el agro puede utilizar los nuevos medios para valorar la actividad rural, el intercambio de información, la aclaración de fake news y el compromiso del público urbano. Esto sin dejar de lado la creatividad y el uso del lenguaje visual envolvente.

¿Le pareció interesante? Visite el sitio de la campaña, siga sus redes sociales y contribuya con este movimiento. ¡Vamos a comunicar el Agro!

Los agricultores están presentes todos los días de nuestras vidas

Texto Original: https://plantproject.com.br/novo/2018/07/coluna-agronomidia-ricardo-campo-2-o-agricultor-primeiro/
¹ Ricardo Campo es “agro y no cede!”. Especialista en comunicación, ya actuó en el equipo de marketing de DSM / Tortuga y hoy integra el equipo de Rabobank Brasil. Es técnico en artes gráficas por el SENAI, graduado en propaganda por el Mackenzie, especialista en marketing al por menor por el Senac y con MBA en marketing por la FGV. Adora fotografiar lo cotidiano agrícola y también es instructor de Educapoint para el curso online de “Marketing y Marcas en el medio rural”.